domingo, 18 de agosto de 2013


                                                         
Se paró frente al muro blanco, con su mente divagando
recordó tristemente que no había podido terminar su obra.
Tenía pendiente averiguar el flujo de las aguas
y convertirlas en cascadas más potentes.
Apareció la pena y el dolor
nunca había dejado a medias sus encomiendas.
También recordó a su madre en la antesala,
a su padre conversando sin palabras.
Un cuervo enorme oprime el centro de su pecho
percibió su fe , sus delirios,
de pronto…sintió que las alas comenzaron
aletear para salir de la prisión que lo retiene.

martes, 6 de agosto de 2013

Pintura y Poema



No vayas a tomar las alas de la abeja

para escribirle a tu amada,            

puede ser que vuele lejos y no llegue a su destino.

Hay un piloto buscando nuevos rumbos

pero nadie quiere darle un instante de respiro.

Si tejes todas las flores y te hace un rompecabezas

cambiaras  la dulzura del momento en que el rocío se posa.




martes, 23 de julio de 2013

Poema y Pintura

 

 

Las mariposas han donado sus alas,
para hacer el vestido de la novia.
La novia ha regalado su ramo de flores
a los muertos tendidos en los rieles del ferrocarril.
Los peces se han tragado la carnada,
no la pueden expulsar.
Con el vestido, los muertos y la carnada
podemos ir de excursión.


jueves, 4 de julio de 2013

Max Ernst. After Us Motherhood. 1927.




Sin límite

 

¿Que se tiene entre sus brazos?

Un sinsonte, un canario o tan solo un tomeguín.

Se tiene todo el infinito del amor y del perdón.

 

En mis brazos,

un quejido,

un latido de amor y  perdón.


Max Ernst. The Couple or The Couple in Lace. 1925.




Desproporción en un cuadro

 

Una pareja se arregla

para la fiesta de Pascua,

se visten de flores y gallos.

Ella esta cual muñeca negra

en un rincón de la casa,

el precisa de las luces

para mostrar sus encantos.

La pareja se da cuenta

que cada cual tiene un cambio,

el que mira a la izquierda

es contrario a la derecha.

La pareja que se encuentra

 para las fiestas tempranas,

se convierten en papeles,

papeles para otros bailes.

 

12/29/10



Max Ernst. The Equivocal Woman (also known as The Teetering Woman).




En silencio con roturas

 

Se me ha ocurrido enredarme,

entre alambres y cintas.

He puesto sobre mis ojos un sinfín

de calamares, he mantenido el equilibrio

aunque he perdido mi vista.

Pero lo que más añoro es tener

a otro cuerpo que palpite.

El estar entre columnas,

entre concreto y cemento,

no me deja oír el latido de otra vida.

Mantengo mis manos cerca

con intención de hacer señas

y poder hablar con gestos

desde el  balcón al cielo.

 


Max Ernst. Woman, Old Man and Flower/Femme, viellard et fleur.




Los que se pierden

 

A los pescadores les gusta hacerse a la mar

rodeados de lindas flores.

Las ponen sobre la popa

y las dejan caer al agua

para marcar su trayecto. 

Algunas flores protestan

porque se pierden en la mar,

y no tienen instrumentos

para volver a su nido.

A otras flores no les importa

quedarse lejos de casa.

Ellas prefieren vivir en la cresta de una ola,

con el vaivén y la música

de los delfines y ballenas.


Max Ernst. Castor and Pollution. 1923




Juegos con dados

 

Mi otro yo, se da cuerda,

se monta en bicicleta,

y es capaz de saltar como títere.

Para hundirnos en la mar

se necesita coraje,

y así  navegar al albur.

A mi yo, no sé qué le pasa,

se queda tranquilo a veces

y comienza a balbucear.

Espera con saña los pájaros feroces

que no cesan de volar.

En un mar de aceite

se puede correr el riesgo

de terminar como pan.

 


Max Ernst. Birds; also: Birds, Fish-Snake and Scarecrow. c. 1921




Lugar para mantenerse callado

 

En mi pequeño zoológico del patio

tengo clasificados a todos sus habitantes.

Me gusta estar cerca de los pájaros,

porque mantienen sus bocas amordazadas,

con finos bocados del mar.

Al perro lo tratamos con rudeza

no vaya a ser que se le ocurra

mover la cola a su capricho.

Las garzas las tenemos duplicadas

con tan sólo una no hay castigo,

se necesitan dos para el suplicio.

La víbora la dejamos a su albedrío,

porque ella puede indagar sobre

todo el poderío,

que tiene un sólo inquilino.

 

 


Max Ernst. Young Chimera / Jeune chimère





Aplicación

 

 A pesar de mis débiles piernas,

y de mi cabeza inconfundible,

me he mantenido en este pequeño espacio

con mis zapatos morados y con lazos.

He enseñado ciencias y alquimia,

dependiendo de la gravedad del caso.

He encendido la lumbre en las mentes

de gorriones y de  palomas,

que en algunas noches de insomnio

recuerdan la sinfonía que éramos

capaces de entonar sin piano.

Esos recuerdos parcos y cortos me mantienen

parado aun sobre mis débiles piernas

y con mi cabeza inconfundible.


Max Ernst.Fruit of a Long Experience. 1919.




Perdida de vigencia

 

En estos días a las ollas y los sartenes

les ha dado por quejarse,

al despertarse,

cuando caliento la leche,

o cuando cocino la carne.

Están tan insatisfechos,

que no cesan de implorar.

Cuando me acerco a ellos

algunos gritan bien alto,

otros susurran el lamento,

pero no paran de hacerlo.

No sé, realmente no sé,

por qué están tan rebeldes,

¿Será porque no le presto

atención durante el viernes?

Esa cuchara de alpaca

que terminó su función,

es la que más me gime .

No sé qué hacer,

cuando comienzan a quejarse.

 

 


Max Ernst. Aquis submersus. 1919




Frio en noches tristes del verano

 

La luna es un reloj que se ha perdido

en el cielo y  se refleja sin agujas

en el agua de un estanque.

Yo estoy con mis manos curvadas,

más bien las tengo esculpidas .

Alcanzo ser un mástil sin bandera

o tal vez un poste de alumbrado,

mientras en el foso de la escuela

miro hundirse una frágil fragata .

No detengo las horas de los hechos

no me importa el instante acumulado,

solo pienso en mis brazos

que se encuentran atascados en  mi mente.

12/26/10

 

 

 

 













 

Max Ernst.Family Excursions. c. 1919.




Lo intocable

 

Cotidianidad, dulce cotidianidad,

día a día nos miramos a la cara,

día a día colocamos nuestros sueños

en pequeños barriles.

La costumbre te mantiene inmóvil,

rompiendo  nuestros añejos planes

concebidos en la oscuridad del cuarto solitario.

Planes transformados que se pierden en un vacío,

contrarios, blancos, azules o simplemente verdes,

Decisiones que se crean con el aliento roto,

con monedas con hoyos

y con un poco de marfil.

Vida que se cruzan y se mantienen cruzadas

en el ámbito de una nuez de moscada.

Camino paralelo al infinito,

camino sin fin, olvidado

por uno mismo.

 


Max Ernst. El Beso 1925



Max Ernst. El beso 1925

...

 

Mi pie que define mi silueta.

Es  mi punto final, mi infinito


Max Ernst.Landscape with Wheatgerm. 1936




El derecho de todos

 

En estos días los peces han cambiado de figura,

se han convertido en especímenes distintas,

han conseguido abrir un hueco en sus abdómenes,

han estirado sus cuellos al infinito.

Ya reposan en el lecho de las casas.

Ha habido una metamorfosis distinta,

se dejan enredar en las algas

y juegan cerca de hombres con cornetas.

Los hombres han conseguido entender

a sus amigos, han abierto sus pechos y sus recintos,

han  comprendido que los peces

tienen un lugar en sus dominios.




Max Ernst.Surrealism and Painting. 1942.




Fantasías y más fantasías

 

Las veces  que me quedo inmóvil

consigo dibujar sobre un lienzo de aire

los cuadros que permanecen estáticos en mi mente.

Mis manos salen de mi testa,

como pulpo amarillo,

con la precisión que da mi fantasía oculta.

Me subo sobre un  baúl de mago abandonado

para lograr el equilibrio manso de mi mente.

Siempre logro pintar mis mejores cuadros

cuando estoy en cierne de  un amor rebelde.

 

 

Max Ernst.The Robing of the Bride.. 1940




Sentimientos en el ojo de un pájaro

 

Cada día que me visto de pájaro,

que me envuelvo en las plumas naranjas

y me veo reflejada en espejos dispares,

me pregunto por qué  se  me acercan

con lanzas, los  hombres pequeños que

tienden a  asustarme.

Me pregunto por qué las mujeres de cabellos

lacios y revueltos de arena,

me acorralan, me impiden mis pasos

me empujan , me atacan.

Y los hombres verdes, llenos de rabia

se tiran en el suelo

y consiguen que no vuelva

a usar de nuevo

 mi manto de pluma.

12/23/10


Max Ernst.A Night of Love/Une nuit d'amour. 1927




Armonía

 

Me acuesto contra la cama y

trato de lograr una superficie casi plana

para que todos mis puntos de placeres

engarcen fácilmente  con tu cuerpo.

Me convierto en rompecabezas de mil caras

y permito  que tus manos investiguen

los lugares donde se encuentra

el misterio de  la vida.

En mi centro hay una paloma,

dejo que la misma

bata alas, que murmure,

que se mueva ondulante, ¡como cisne!

que se estremezca, que salte, como conejos

ardientes, dentro de su cueva,

hasta alcanzar la cima de los goces.     

Y luego, dejo que prenda  vuelo hacia el infinito.

 

 


Max Ernst - Approaching Puberty or The Pleiades (1921)





Cultivando un instante

 

Ingravidez, locura del tiempo y el espacio,

ingravidez de las horas locas,

de las estaciones del año,

alcanzarla es una proeza.

Es mejor dejar a un lado los momentos

crueles, que impedir un toque de locura;

no puedes negar tu sensación de aplomo,

no puedes negar tus ansias escondidas,

no cruces la línea de esos  momentos

donde se logran

unir dos  mundos distintos .

No permitas cuando seas mujer,

romper con esos estados de maestría,

no accedas ignorar los momentos en que

pierdes el instante  razonable;

ingravidez sólo ingravidez.

 



Max Ernst.Oedipus Rex. 1922.




Manos que paran el viento

 

Sólo dos seres que se unen

en un experimento arcano.

Se necesita una mano cruel que lo dirija.

Paciencia, siempre paciencia,

no mires hacia atrás, es imposible,

une las almas iguales en una sola

y luego, manipula con saña sus actuaciones.

No permitas que ellos se percaten de tu alevosía.

No permitas el quejido latente de un extraño;

rompe con todo

salta,  no te mantengas inmóvil cual gusano;

 

salta...no más, salta.